Mi intervención en la presentación del libro "Sonetos de una vida" el 28 de noviembre de 2019
Antes de empezar a hablar del libro que nos ocupa, me vais a
permitir que diga a algo. El 12 de mayo de 2017 se presentaba el que hasta hoy,
era mi último libro. Entre los varios agradecimientos, había uno que decía así:
“A Andrés Ruiz Sanz y Fran Montero por embarcarse conmigo en esta travesía de
Editorial Tres Columnas que ahora iniciamos, esperando llegar a buen puerto”. Ese libro es “El infierno que viví” y por
entonces, era la primera publicación de Editorial Tres Columnas. En los
agradecimientos de “Sonetos de una vida” se dice: A Andrés Ruiz Sanz y Fran
Montero, compañeros de Editorial Tres Columnas. Hace dos años y medio
iniciábamos la travesía con la publicación de mi anterior libro esperando
llegar a buen puerto. Hoy seguimos la dirección correcta en busca de ese
puerto. Sois algo más que unos compañeros. simplemente gracias.” Pues bien,
“Sonetos de una vida” es la publicación número 31 de Editorial Tres Columnas. Hemos
presentado libros en Lorca, Murcia, Cartagena, Águilas, Puerto Lumbreras,
Cieza, Alicante, Barcelona, etc… y queremos que sepáis que nos sentimos muy,
pero que muy orgullosos de llevar el nombre de Lorca por bandera.
Y dicho
esto, ahora sí, pasamos a hablar de “Sonetos de una vida”, (Soneto “A Lorca
I”). Lo primero que quiero hacer es agradecer a María Isabel García González
por poner todo su cariño en la realización de las preciosas fotografías que dan
realce a estos humildes sonetos. Y digo humildes, porque más allá de que se
adapten a los cánones de métrica y rima que se le exigen a un soneto, soy
consciente de que estos sencillos versos no van a pasar la historia por ser una
poesía pura, profunda, ni mucho menos elitista, así que me disculpen los
excelentes poetas que sé hay en esta sala. Pero todos tienen un denominador
común: que están hechos con el corazón. El corazón que he puesto para hablar de
sentimientos hacia personas que quiero, a la Lorca que adoro, o a otros sitios
y cosas que de una u otra manera forman parte de mi vida.
Y muchos os
preguntareis el porqué de este proyecto, que a buen seguro resulta cuanto menos
curioso ¿verdad?: sonetos y fotografías, poemas e imágenes. Conocí a María Isabel
hace algunos años en la montaña, una de sus pasiones, igual que una de las
mías, en ese ya emblemático Trail Peñarrubia que junto con el Ayuntamiento de
Lorca, organizan nuestros amigos de Apat, a quienes agradecemos su presencia.
Unos meses antes del verano, María Isabel publicó en las redes una preciosa
fotografía, que a mí se me antojó que encajaba perfectamente con uno de los
sonetos que yo tenía en una vieja libreta guardada en un cajón. Le pedí permiso
para publicarla junto con mi soneto. Unas semanas después, una nueva foto me
causó la misma sensación y también la publicamos. Y así, de esta manera tan
simple, surgió la idea, le propuse a María Isabel este proyecto que ella
aceptó, por lo cual le estoy profundamente agradecido porque creo que hemos
conseguido realizar una cosa, que como decimos por aquí, ha quedado bastante
“apañá”.
Así que, muchas gracias y le cedo la palabra a María Isabel.
Mi intervención en la presentación del libro "El infierno que viví" el 12 de mayo de 2017
Buenas noches y mi sincero agradecimiento a todos por venir en esta noche de viernes, en la que, afortunadamente, Lorca ofrece varias ofertas culturales, deportivas y de otro tipo. Gracias por elegir esta.
Tras el montaje fotográfico que hemos
presenciado y la lectura de un pequeño fragmento, voy a hacer un comentario muy
breve sobre esta historia, que yo considero de segundas oportunidades, que es
“El infierno que viví”. Isabel, ya entrada en la cuarentena, cuenta de manera
retrospectiva su vida empezando por la década de los 70, cuando ella tiene once
años. En capítulos alternos, Daniel empieza a contar la suya, a raíz de reencontrarse
con Isabel de forma casual tras casi dieciocho años. La vida no ha sido fácil
para ninguno de ellos, y ya en la madurez , esa misma vida les vuelve a someter
a una nueva prueba. Y como dice el famoso tópico, “hasta aquí puedo leer”.
Como ya habéis observado y venimos
anunciando desde hace algunas semanas, este libro es el primero de Tres
Columnas, Editorial de nuevo cuño, que se ubica en Lorca y que nace para dar
voz a los autores de la Comarca del Guadalentín. En cuanto a la Editorial solo
decir eso, porque más adelante está previsto hacer una presentación oficial en
la que se informarán de más detalles.
En lo que sí quiero hacerme más
extensivo es en el capítulo de agradecimientos. Ni en mis mejores sueños podría
imaginar que gente de Águilas, Puerto Lumbreras, Alicante, Murcia, Cartagena,
Cieza, perdonar si me dejo alguien, viniera exclusivamente a una presentación
de algo mío. Nuevos Lorquinos, Lorca Féminas, Asociación Cultural y Deportiva
Stevia, Peña Madridista Ciudad del Sol, Peña Senderista El Abuelo de la Hoya,
medios de comunicación, compañeros escritores, familia, vecinos, en definitiva
amigos, mi agradecimiento infinito por acompañarme esta noche. Soy consciente
de que congregar a tanta gente en un sitio como este, en una noche como esta,
no es porque sea mejor o peor escritor, aunque trabaje para mejorar día a día,
sino porque tengo amigos, muchos amigos, algo de lo que me siento tremendamente
orgulloso.
Gracias a Carmen Martínez Mateos,
Carmen Oliver Ródenas, María del Amor Hernández, María Ramona Molina, Marisol
Morente, Rosa García Oliver y Rosa Raya Carrasco, las siete poetas de diferentes puntos de la
Región que han puesto su pincelada en forma de versos para abrir esta historia.
Todas están presentes excepto la poeta de Cartagena Rosa García Oliver que por
motivos de trabajo se encuentra en Portugal y a la que desde aquí mando un
fuerte abrazo.
Gracias María Ramona Molina, porque
además de ser una de esas poetas, ha sido la correctora de este libro, y por
recitar como tú sabes hacer esos versos.
Gracias Andrés, Fran y Álvaro, que os
habéis embarcado conmigo en esta aventura de Editorial Tres Columnas y habéis
compartido también los nervios y el estrés de estos días.
Gracias Jorge González, no solo por
acompañarme esta noche y conducir el acto con tu habitual maestría, sino por
ser desde los medios para los que trabaja, siempre la voz de la cultura en
Lorca.
Gracias Miguel Ángel y Henar, que con
su prodigiosa voz él, y su dulzura ella, han hecho la lectura del fragmento que
hemos escuchado.
Gracias Lola Guerrero Sánchez, por
las preciosas fotos con las que se ha hecho el montaje que hemos presenciado.
Recuerdo que te dije, voy a necesitar unas fotos, tú que tienes muchas, seguro
que están las que busco, y me contestaste, si no las tengo voy y las hago. Y
eso es lo que ha hecho. Hacerlas para la ocasión. Gracias, Lola.
Gracias, Miriam García “Amarela”, sé
que has hecho un gran esfuerzo para poder estar aquí y poner tu preciosa voz en
esta presentación. Te lo agradezco infinito.
Gracias a APAT LORCA (la Asociación
de Padres del Centro de Atención Temprana de Lorca), por estar aquí esta noche,
pero sobre todo por vuestra valentía y vuestro coraje. Sois un ejemplo a
seguir. Los derechos de autor de este libro son vuestros, ojalá que sean
muchos.
Y gracias a todos y cada uno de los
que habéis tenido la amabilidad de acercaros esta noche al Centro Cultural de
la Ciudad de Lorca.
Mil gracias, de corazón.
La pongo porque esta fue la primera vez en la que me senté en una mesa frente al público para presentar un libro.
Desde la misma tarde de aquel fatídico 11 de Mayo de 2011 en el que nuestra ciudad fue tan cruelmente golpeada por la Naturaleza, sentí la necesidad de expresar mis sentimientos y mis pensamientos. Y fue la noche del 23 de Junio, en un día tan especial para este barrio porque en otras circunstancias debieran haber comenzado nuestras tradicionales fiestas de San Juan, cuando me decido a sentarme frente al ordenador para empezar a darle forma a este proyecto, que como en él mismo digo, no es más que una de las miles de historias que se podrían contar, tantas como ciudadanos vivimos en primera persona aquella trágica tarde de primavera.
Desde siempre me ha gustado leer, y también escribir, algo esto último que ha resultado ser una sorpresa para muchos, aunque no tanto para quienes me conocen bien. Por supuesto que éste no es el libro que yo hubiera deseado elegir para hacer mis primeros pinitos en el mundo de la escritura, pero os tengo que decir que en el tiempo que ha durado su preparación, me ha ayudado a llevar de mejor talante esta pesadilla que para mí como para tantos de nosotros supuso lo acontecido aquel 11 de Mayo. Es como si al exteriorizar mis sentimientos, resultara liberado de una pesada carga.
Así pues, este pequeño libro, es mi particular historia de los terremotos, tal y como yo los viví, y en el relato, he ido intercalando varios poemas, concretamente sonetos, de siempre mi composición favorita, ya que los veo como pequeñas construcciones, pero suficientes para hablar de alguien o algo de una forma clara, concreta y concisa. También he intercalado durante el relato algunas decenas de fotos, muchas de ellas personales: mi calle, mi edificio, mi casa, entre otras. Algunas de ellas no son de suficiente calidad para apreciarse como se debiera, pero no es el objetivo principal de este pequeño volumen. Con los poemas, dedicados a Lorca y sus cosas, y escritos todos ellos con anterioridad al 11 de Mayo, he pretendido quitar algo de dramatismo al relato, deseo haberlo conseguido. También deseo que la lectura de este libro, o simplemente su sola existencia nos sirva para recordar aquello que pasó, no solo a nosotros los miles de afectados, que difícilmente lo podremos olvidar, sino a todos aquellos en cuyas manos está la llave de nuestra recuperación y de nuestra vuelta a la normalidad. Así mismo, como también digo en alguna de sus páginas deseo fervientemente transmitir un soplo de esperanza para nuestro pueblo y para nuestra gente, en la completa seguridad de que nos levantaremos y seguiremos caminando con más fuerza que nunca.
El acto de esta noche podría haberse realizado en cualquiera de los sitios para estos eventos de los que disponemos en Lorca, pero desde el principio tuve claro, que si este proyecto llegaba a ver la luz, como felizmente así ha sido, tenía que ser aquí, en mi barrio (la Zona 0) y con mi gente, y creo que el escenario no puede ser más apropiado que esta construcción prefabricada realizada tras el derribo de la Iglesia de Cristo Rey que tan seriamente resultó dañada y que podemos contemplar en la portada de este libro.
Quiero dar las gracias a Don Juan José, párroco de Cristo Rey, por habernos cedido la Iglesia para celebrar esta presentación donde yo quería, y a mis amigos y compañeros de la Junta Directiva de la Peña Madridista “Ciudad del Sol”, porque han hecho de ésto algo suyo organizando este acto sin que tenga que preocuparme de nada.
Mi agradecimiento a María Dolores Hernández Verdú, Presidenta de la AA.VV. La Viña por aceptar mi petición de realizar el prólogo.
Al escritor lorquino Andrés Ruiz Sanz que pese a su insultante juventud ha publicado ya dos libros, los cuales me permito recomendaros, gracias por confiar y guiarme en este humilde proyecto, por escribirme el epílogo y por acompañarme en esta presentación.
Y por último, gracias por vuestra asistencia, es un verdadero honor sentirme acompañado de tantos amigos. Gracias a todos, y muy especialmente a quienes habéis venido de fuera, haciendo el esfuerzo de desplazaros en esta noche en la que los ecos de la cercana navidad aún están presentes. Y nada más, mi ferviente deseo de un feliz año para todos y de que este pequeño libro sea de vuestro agrado.